La sociedad patriarcal se ha encargado de apropiarse del cuerpo de la mujer, dándole importancia extrema a su aspecto, quitándoles total libertad de su liberación sexual y de su cuerpo, incluyendo la belleza. El patriarcado ha creado ciertos estándares de belleza en las mujeres, a la gravedad de que igual se ve afectada la salud.
“Dice Wolf, lo más importante es que la identidad de las mujeres debe apoyarse en la premisa de la belleza, de modo que las mujeres se mantendrán siempre vulnerables a la aprobación ajena, dejando expuesto a la intemperie ese órgano vital tan sensible que es el amor propio. » (Varela, 2008)
La diversidad corporal muchas veces no entra dentro del “lenguaje” machista, ya que el patriarcado creó un estereotipo perfecto para las mujeres, lo que hace que varias de ellas no estén conformes con su cuerpo, porque no entran dentro de los rangos de belleza. Por lo que comienzan a acudir a cirugías estéticas . Según BBC News, las personas acuden a cirugías estéticas para poderse sentir mejor, ¿pero realmente ayuda?
“Hay una presión creciente para parecer joven y guapo, especialmente en el caso de las mujeres, a las que todavía se les juzga más por su aspecto.
Los medios de comunicación están llenos de programas que idealizan la cirugía estética y de famosos que cada vez parecen tener más vitalidad.”
El crear estos estereotipos, de una sociedad “bonita” divide completamente al género, crea espacios mayores donde la sociedad crea sus propias jerarquías de gustos y preferencias, al final, el querer crear este tipo de círculos, dejan de controlar sus propios cuerpos, y dejan que la sociedad de esas jerarquías diga lo que es aceptable y lo que no es aceptable. Crear un cuerpo perfecto, no solo aumenta las jerarquías o el consumo patriarcal, sino que también la relación de mente cuerpo. El conocer el porqué de la materialización en los cuerpos, nos lleva a conocer, como la mujer se pierde y se desconecta de su propio cuerpo para llevarlo a un consumo específico, que es el hombre, alterando su cuerpo de forma peligrosa llevándolo a prácticas de belleza. Siglo XIX
“N unca la mujer ha sido tanto un objeto como lo es a l día de hoy . En la era de la cirugía estética todo parece posible. Los cuerpos tratan de adaptarse a los deseos. En una sociedad de ganadores lo imperfecto se aborrece. Sólo se admiten los cuerpos perfectos, y la perfección se define según ciertos cánones muy determinados, cánones que definen lo que es femenino y lo que es masculino según nuestra sociedad, y que descartan a los cuerpos que no se adaptan”. (Varela, 2008)
La idea de la modificación del cuerpo se ha visto como algo instrumental, como una maquina modificable, se habla sobre el derecho a la elección sobre propio cuerpo, la idea feminista de decidir sobre su cuerpo, pero no se sabe si ese cambio físico se lleve al consumo. El hecho de la existencia del sistema patriarcal es que se cree
que cada arreglo al cuerpo femenino es para su consumo, por eso existen las crítcas, las imprudencias . La revista de ciencias sociales de Costa Rica intervino a hacer un estudio a las universitarias, donde se refleja el consumo del cuerpo femenino dentro de la Universidad.
Las mujeres creen que tener control sobre el cuerpo, sobre su propio cuerpo, se escapa del círculo patriarcal, pero de esta forma se sienten liberadas de hacer y deshacer lo que quieran con sus propios cuerpos. La persona que decide transformar su cuerpo no reconoce realmente los cambios, los cambios los hizo para una sociedad que diariamente pide lo “indicado”. Instagram, una de las redes más importantes en estos tiempos , (según el análisis de informe “We are social” y “Hootsuite”) donde se muestra casi toda la vida de las personas, donde demuestran ser quienes no son, donde muestran sus caras, sus cuerpos viéndose mejor, vidas y cuerpos perfectos. Indagué por la aplicación hasta llegar a una cuenta llamada @obrasdeartecomentadas, donde su intención es dar a conocer varios artistas.
Entre todas las obras, encontré unas fotografías y un video sobre la normalización de cuerpos gordos. Visibilizar que en verdad la gordofobia si existe y que esos cuerpos merecen ser liberados de la opresión social gordofobia y la violencia que reciben. Una de las artistas se llama Sofía P (@pantalonsillosdehombre) ella crea performance mostrando su cuerpo, ella es una mujer gorda, hablando de cómo quiere reflejar el peso y eliminar la gordofobia, rompiendo aquellos estereotipos que hasta a las mujeres gordas se les han implementado, como el tener curvas, sin estrías, ella refleja el cómo ser gorda, es desbordar de felicidad . (Niall Richardson, 2003). Otra artista llamada Livier Miroslava, mostrando a una modelo a base de una serie de fotografías, donde la modelo es estereotipadamente gorda agarrando un maniquí con cuerpo de barbie. Las imágenes hablan por sí solas, de cómo la sociedad ha normalizado solo los cuerpos “perfectos” dejando a un lado la diversidad que puede existir, los cuerpos no normalizados son los cuerpos extraños y enfermos . (Niall Richardson, 2003)
Haley Morris hizo un trabajo que habla sobre la moral social, como la gente sigue sin normalizar ni aceptar el sobrepeso, las miradas que obtiene la gente con sobrepeso día con día por el simple hecho de no ser normalizados. La artista tomó cientos de fotografías en diferentes partes del mundo, en frente de la cámara, una modelo con sobrepeso, la cámara y el tripie eran los instrumentos y herramientas, el proceso de esto es que la gente pasaba y la forma en que la gente la miraba era indiferente, como si nunca hubieran visto a una persona con sobrepeso, las miradas hablan por sí solas , una mujer normal, delante de una cámara, les parece casi aberrante .
En conclusión, el cuerpo de la mujer está sometido a grandes críticas desde hace ya mucho tiempo, el feminismo ha buscado liberarnos de este sistema para poder tener control sobre nosotras mismas. El momento en el que el cuerpo comienza a ser criticado, a no ser aceptado por la sociedad en general, uno mismo comienza a despreciar y a no darle sentido alguno. Comienza a transformarlo con malos hábitos o llega al extremo de cambiar físicamente totalmente.
Bibliografía
– (SIN NOMBRE). Fotografía Livier Miroslava. Aguascalientes. La bonita de Mar.
(2021)
– Wait watchers. Fotografías de Haley Morris. USA. Wait Watchers. (2013)
– Varela, N. (2008). Feminismo para principiantes. Barcelona. Ediciones B, S. A.
https://kolectivoporoto.cl/wp-content/uploads/2015/11/Varela-Nuria-Feminismo-
Para-Principiantes.pdf
-Lavin, M. de los A. P. (2017). La noción de cuerpo en Judith Butler: una estructuraimaginada, producto del deseo. Daimon Revista Internacional de Filosofía, 713–718 ttps://doi.org/10.6018/daimon/269721
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